En Zn Ibérica no dejamos nada al azar. Cada filtro que recibimos pasa por un proceso homologado y meticulosamente controlado. Comenzamos con una evaluación inicial que determina el nivel de obstrucción y posibles daños estructurales. Después, aplicamos el sistema de limpieza en seco tipo FSX.
Este proceso combina aire a presión y regeneración térmica en horno a más de 600 °C, lo que permite eliminar residuos acumulados como cenizas, hollín y polvo mineral. En casos severos, se repite el ciclo para asegurar una limpieza completa.
Durante todo el proceso, se recogen datos técnicos —como contrapresión antes y después, estado físico del núcleo cerámico, y grado de recuperación—. Esto nos permite emitir informes detallados, ofreciendo a nuestros clientes no solo un filtro limpio, sino también evidencia técnica de su rendimiento recuperado.
Así, cada limpieza se convierte en una operación precisa, medible y fiable, que alarga la vida útil de los equipos, reduce gastos, previene averías críticas, y además proporciona indicios importantes acerca de estado del motor.
Cuando se mide, se mejora. Por eso convertimos cada limpieza en una fuente de datos técnicos para tu mantenimiento.
Inspección inicial y diagnóstico rápido.
Aplicación de aire a presión, regeneración térmica y segunda limpieza.
Informe con datos de contrapresión y eficiencia recuperada.
Con el filtro listo para volver a operar de inmediato.